Inescrutable

“Si hay alguien que pueda presentarse ante Aslan sin que le tiemblen las rodillas, o es más valiente que nadie en el mundo, o es, simplemente, un tonto…

… ¡Por supuesto que es peligroso! pero es bueno, él es el rey, les aseguro…

… Cuando trataron de mirar la cara de Aslan, sólo pudieron vislumbrar una melena dorada y unos ojos inmensos, majestuosos, solemnes e irresistibles. Se dieron cuenta que ellos eran incapaces de mirarlo.”

Así describe el autor C. S. Lewis a uno de sus personajes principales de la Saga “Las Crónicas de Narnia”, un conjunto de siete libros que narran una historia en un mundo de fantasía y especies parlantes, donde hay una constante lucha entre el bien y el mal, donde la justicia prevalece. Aslan, según el escritor británico, es un magnifico y omnipotente león, creador y gobernante un mundo ficticio conocido como Narnia. Es el ser supremo, justo y bondadoso que tiene poderes únicos y cualidades incomparables, y que aparece de forma misteriosa en toda la historia. Aslan nunca tuvo un origen, sino que él creó todo lo que hay en el mundo Narnia, incluso sus habitantes.

El autor desarrolla la fascinante historia, describiendo como niños humanos entran a aquel secreto mundo, protagonizando los episodios y viviendo aquella aventura como si fuera real, luego de cumplir una determinada misión, vuelven al mundo en el que verdaderamente viven. Todos ellos se han encontrado en algún momento de la historia con el increíble león, pero en uno de los relatos del libro, Aslan decide morir para salvar a uno de los niños, el cual fue culpado de traición, pero al amanecer él resucita contodo esplendor y asombro.

Estas obras, tan famosas y exitosas del novelista Lewis, han generado, desde su creación, cierta controversia en cuanto al significado bíblico de aquel león y de toda la saga. Sin embargo, en una de sus cartas, dirigida a un niño que leía sus obras como respuesta a esta incertidumbre, Lewis expresa lo siguiente: "Supongamos que existiese un mundo como Narnia, y supongamos que Cristo quisiese ir a ese mundo y salvarlo (como lo hizo por nosotros). ¿Qué pasaría entonces?... Pues las crónicas son mi respuesta. Como Narnia es un mundo de bestias que hablan, pensé en encarnarlo como una bestia que habla. Le di forma de león porque se supone que el león es el rey de las bestias, y Cristo es el León de Judá mencionado en la Biblia."

Esta respuesta viene a traer luz sobre la significativa discusión, pero también dota a la novela de un profundo y casi imperceptible significado, que Lewis quería que los niños comprendieran en sus infantiles obras como todo escritor cristiano. Literalmente me fascina la forma en que este autor describe el misterioso personaje y como hace que éste, simbólicamente, nos haga recordar a Dios.

Estoy muy seguro que todos los que están preparadamente envueltos en el mundo de la escritura y la semántica, los más destacados filósofos y científicos, se quedan cortos al tratar de entender o describir a Dios, esta asombrosa deidad no cabe, ni se acomoda en mentes humanas y finitas.

Al igual que las Crónicas de Narnia, recuerdo una historia cargada con sobrenaturalidad de un destacado pastor. Aunque no nació para ser guiador de ovejas, estaba en un desierto, después de haber escapado de su tierra natal, ya que temía por haber matado a un ciudadano de ella. Creció en un palacio egipcio, pero fue concebido y criado por una madre israelita, que conocía y temía al Dios verdadero. El pueblo de Israel había sido esclavizado por Egipto, durante muchos años y nuestro destacado pastor de ovejas era perseguido por un propósito del Señor, que lo elegía como el futuro libertador de su pueblo.

Un día Moisés dirigía las ovejas y en medio del desierto, entonces vio una zarza que ardía, pero era normal ver aquel evento natural, por la exagerada temperatura. Al cabo de unas horas, algo empezó a sorprenderlo, la zarza estaba encendida en fuego, pero no se quemaba; de pronto lo común y lo normal, se había convertido en algo sobrenatural. De repente de aquel arbusto árido salió una voz tan fuerte e irresistible que marcó y compungió aquel hombre: ¡Quítate las sandalias de los pies por que el lugar que pisas santo es!

…Cuando Moisés oyó esto, se cubrió el rostro porque tenía miedo de mirar a Dios. (Éxodo 3:5 NTV). De esta forma Dios llama a Moisés, el gran libertador de Israel, y este encuentro personal cambió su vida para siempre, es la primera vez que vio con cercanía y de forma perceptible la eternidad de un Dios inescrutable.

Dios es más grande de lo que tu alguna vez has pensado, me impresiona saber que el mayor de los conceptos que se ha tenido sobre su hermosura no se asemeja a su esplendor;ningún humano y nada de lo creado podría estar de pie ante tanta santidad y tanta gloria. El tiempo no lo limita, porque el controla todas las cosas, juega con los planetas y se acomoda entre nosotros. Es misterioso y omnipotente, es terriblemente justo y agresivamente amoroso. Si conociéramos al Dios que mencionamos a diario, nos diéramos cuenta de que ni siquiera somos capaces de mencionar su nombre por nuestra acusadora boca, si viéramos un milímetro de su poder, sabríamos que Él se merece un poco más del respeto que le estamos dando.

Dios es tan real que con solo mirarnos disipa nuestras dudas, es santo, omnisciente, está sentado por encima de todo y gobierna todo lo creado, su esencia es el amor, y la pureza y santidad son su color de piel. Me sorprende saber que existe un Dios tan eterno que su infinidad, sus atributos nunca se terminan de descubrir completamente, sé que soy un Moisés que vivirá eternamente sorprendido.