MODA: Arma peligrosa

Todos, en algún momento de nuestra vida, hemos sucumbido ante los efectos de la moda. Desde lo más común como la vestimenta, hasta nuestra forma de hablar o escribir. Cabe destacar que no me refiero a moda como el efecto de seguir una tendencia y mucho menos expreso que todo lo que engloba esta palabra sea malo o peligroso, no hablaremos de eso, esta vez nos iremos un poco más profundo.

Algo que he notado desde hace un tiempo es como la iglesia (y al mencionar la iglesia me refiero a nosotros como cuerpo, no a la institución misma), ha intentado adoptar las modas del mundo para poder llegar a la gente del mundo, me explico, queremos disfrazarnos como lobos y vernos como todos los demás, con el sentir de ser aceptados por todos en la sociedad impartiendo el mensaje del cordero, cosa que es prácticamente imposible, se supone que los escogidos estamos para marcar esa diferencia, y con esto no quiero que suene discriminatorio ni mucho menos, o que parezca que la cristiandad es una élite exclusiva en la que hay vestimentas especiales y únicas, pero la biblia es muy explícita en estos temas, y su palabra es algo que estoy más que segura, nunca pasará de moda.

1Juan 2.15 nos dice: ´´No améis al mundo, ni las cosas que están en el mundo. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él´´. Uno de los efectos del libertinaje que está sufriendo la iglesia moderna es este, nos fiamos tanto en ‘la libertad que Dios nos ha dado’ que nos olvidamos de las razones por las cuales Dios nos ha hecho libres y caemos, lastimosamente, en actos que pueden deshonrar nuestro testimonio. Desde vestimentas inapropiadas, el uso de modismos en nuestra forma de hablar, señas y gestos diversos y sobre todo, la utilización de elementos que son hechos por el mundo, para propiciar mensajes con antivalores  y de igual forma usarlos para promover el evangelio y cuando no genera el impacto o efecto que queríamos, nos preguntamos ¿Por qué no se entregan las almas a Cristo? Asumimos que el enemigo nos hace fuerte la batalla, ¡y sí que la hace!, pero nos estamos durmiendo y haciendo que su trabajo sea más fácil. 1Pedro 5:8 nos habla sobre esto, ´´Sed sobrios, y velad; porque vuestro adversario el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar´´; No tomamos en cuenta que es nuestro deber que el mayor atractivo de la iglesia sea Jesús, lo que Dios ha depositado en nosotros, la esencia del Espíritu Santo al hablar, la marca que deja un encuentro con Dios. El enemigo ha logrado infiltrar su sistema a nuestro alrededor, haciendo creer a muchos que lo malo es bueno, ¿cómo pretendemos ser la SAL si permitimos que se mezclen otros sabores entre nosotros? Mateo 5:13 ´´Vosotros sois la sal de la tierra; pero si la sal se desvaneciere, ¿con qué será salada? No sirve más para nada, sino para ser echada fuera y hollada por los hombres´´.

Todos los que hemos aceptado a Jesús como nuestro salvador, lo hicimos porque vimos algo distinto en esa oferta, algo único. Muchos lo vimos como la verdadera solución a nuestros problemas, otros como el único que nos puede dar la felicidad, quien puede llenar algún vacío, en fin. Todos en algún momento intentamos llenar eso con otra cosa y como resultado vimos que Él era quien podía darnos eso que buscábamos, y resultó ser que Él eso y mucho más, ¿qué nos hace pensar que eso ha cambiado? El mundo sigue brindando las mismas cosas vacías, vanas y falsas y Jesús sigue siendo el mismo. ¿Por qué dejamos de ofrecer a Jesús y caemos en la moda de ofrecer riquezas, prosperidad y finanzas, cuando su gracia es lo único que nos debe llenar? Pablo en su segunda carta a los corintios nos habla que la gracia de Dios sobre él ha sido más que suficiente y que si de algo él ha de gloriarse es de lo que Dios ha hecho con él a través de sus debilidades, no de todas las riquezas y bendiciones que ha recibido de Dios, no de lo próspero que uno es al seguirle. Y me ha dicho: Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad. Por tanto, de buena gana me gloriaré más bien en mis debilidades, para que repose sobre mí el poder de Cristo. 10 Por lo cual, por amor a Cristo me gozo en las debilidades, en afrentas, en necesidades, en persecuciones, en angustias; porque cuando soy débil, entonces soy fuerte. Lo atractivo del evangelio no son los grandes eventos con reflectores y luces que llamen la atención, ni las grandes cruzadas, su atractivo tiene un solo nombre y es JESÚS, piedra principal del ángulo, bien fundamento y cimentado desde antes de la creación. 

Como pueblo escogido por Dios que somos, nación santa, debemos estar alerta a las ofertas y la publicidad que el mundo nos hace día tras día, debemos evitar caer en los modismos que vemos cada día, y del que lamentablemente, muchos hermanos ya son parte. Soy de las que piensa que hacer la voluntad de Dios es mejor que estar a la moda y si eso produce desagrado en algunos no debo permitir que eso me desenfoque ¿Cuánto más desagrado provocó Jesús con su ministerio? Debemos entender que el enemigo nunca estará de acuerdo ni feliz cuando demos pasos firmes. Nuestro mayor deber es ‘poner a la moda’ la gran comisión. Mateo 28:19 ´´ Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo´´; Que todos los que hemos sido escogidos por Dios, conforme al propósito o diseño que Él ha depositado en nosotros, llevemos un evangelio puro y real a quienes lo necesitan. No hay cosa que cautive más a un sediento, que la verdadera fuente de agua viva. Y como ya ustedes saben, esa fuente tiene un solo nombre: JESÚS. No seamos como una simple moda pasajera, ni permitamos que nuestra pasión por llevar la palabra de Dios sea por temporadas. Seamos como Jesús, seamos diferentes por ese toque especial que se nos ha impartido a través del Espíritu Santo, seamos la sal.